Os presento a Lassie

 Esta es Lassie, una perrita de casi 17 años.

¡17 años juntas! 

Cuando Lassie llegó a mi vida yo tenía 10 años ¡la vi nacer! Llegábamos de una excursión del colegio cuando mi padre dijo “¡están naciendo los perritos!” y la vi nacer… desde el primer momento que la vi junto a sus 3 hermanitos, me quedé prendado de ella… en seguida dije que “¡la blanquita para mí!” y así fue, recuerdo que mi madre me regañaba porque desde el día que nació todo el tiempo la tenía en brazos, yo le quería dar el biberón pero mi madre me decía que la llevase con su mamá… cuando apenas tenía un mes, la metía en el carrito de las muñecas y le daba paseos por el barrio ¡y ella tan contenta! Mi madre no quería que durmiese conmigo pero, a escondidas, me la metía en la cama, siempre hemos dormido juntas… desde que llegó a mi vida, nunca he estado sola, ella siempre ha estado ahí, conmigo, fue mi compañera de juegos, mi amiga inseparable, la que cuando me veía decaída me llenaba de besos... y ahora que se va haciendo mayor es mi bebé, mi niña consentida, mi precesita…

¡Cuantos recuerdos! Lassie era una perrita muy traviesa y juguetona y muy dependiente de mí, ¡siempre estaba detrás de mí! Yo le llamaba "mi sombra" :-)

Ahora ha cambiado mucho, ya no queda nada de aquella perrita traviesa y cariñosa...

En el 2007 la operamos de un tumor de mamas, el post operatorio fue horrible, pensábamos que no lo iba a superar pero ella es una luchadora nata y poquito a poquito se recuperó totalmente.

En el 2009 (abril) se sacó la cadera y la intervinieron para ponerle una prótesis ¡la recuperación fue sorprendentemente rápida! Tenía que "regañarla" para que no saltara y para que no corriera tanto ¡se sentía como un cachorito! ¡no paraba!

Pero, en octubre del mismo año hubo una nueva recaída, esta vez una infección uterina (piometra) y a sus 13 años tocó volverla a intervenir para vaciarla por completo, el veterinario tenía sus dudas por si no respondía bien a la anestesia pero finalmente la operó y fue un "3 en 1" ya que además de vaciarla, aprovechó para eliminar la hernia inguinal que arrastraba desde hacia tiempo y un tumorcito en el costado.

Por tercera vez, de vuelta al "collar isabelino" ¡qué odio le tenía la pobre! este post operativo no fue tan rápido como el segundo pero tampoco, por suerte, tan lento como el primero.

En el 2010, más o menos, Lassie empezó a ir "cuesta abajo"... empezó a estar mucho menos ágil, empezó a pasar más horas durmiendo, empezó con problemas de apetito... y sobre todo empezó a encorvarse...

Nueva visita al veterinario, le detectó artrosis en la columna y desde entonces está en tratamiento para ello (cosequin y carprodil) a diario y de por vida.

Desde el 2010 hasta ahora, Lassie estaba relativamente bien. Este invierno lo ha pasado mal, pasaba más tiempo acostada, tapadita con su mantita, bien abrigada, pero estaba feliz, aunque os soprenda, con 15-16años ¡aun tenía ganas de jugar! En casa tengo un conejito (Homer) con el que jugaba mucho y con las perritas de mis padres, en el chalet, también disfrutaba mucho…

Aun recuerdo cuando llevaba prisa y corría detrás de mí por el pasillo mordiéndome los pies… recuerdo cuando se “enganchaba” a la fregona mientras fregaba… recuerdo cuando corría detrás de Luna, Neli y Betty o cuando jugaba con Homer… hace tan poco tiempo de aquello…

Hace un par de meses, empecé a notar que se comportaba de forma extraña: ya no controla el pis, pasea sin rumbo fijo, como pérdida, se desorienta con mucha facilidad, en vez entrar al cuarto se queda dando vueltas en la puerta, se queda mirando a la nada, a veces nos mira como si no nos conociese de nada, duerme excesivamente durante el día y muchas noches las pasa “paseando”, también esta cada vez más torpe… y lo peor es que se ha vuelto muy independiente en el sentido de que ya no viene a saludarnos, ya no pide caricias, ya no va detrás de mí, le gruñe a Homer cuando quiere jugar con ella…

La semana pasada fui al veterinario a la revisión de la artrosis y de un tumorcito que tenía pequeñito (pero le ha crecido L) le comenté estos síntomas y me confirmó (lo que ya me temía porque había buscando información por internet) que sufría “disfunción cognitiva”, una enfermedad degenerativa, parecida al alzheimer, que no tiene cura pero que con un tratamiento puede evitarse que la enfermedad avance deprisa aunque me dio a entender que entre la artrosis y el tumor que tiene (que a su edad ya no la va a operar para quitárselo)…

Enfermedad degenerativa parecida al alzheimer… cuesta decirlo…

Es una enfermedad cruel… con muchos altibajos… cuando salí de la consulta del veterinario estaba totalmente hundida pero empiezo a asimilarlo… que le queda poco tiempo de vida es un hecho, eso no lo puedo cambiar y llorando por los rincones pensando en lo que pueda pasar no voy a conseguir nada… lo único que puedo hacer es intentar que ella esté bien, que no le falte de nada, que aunque a veces no me conozca se sienta querida por mí… no sé de donde voy a sacar la fortaleza para no hundirme en los peores momentos de esta enfermedad pero tengo que ser fuerte, por ella, por mi princesa, y para ello tengo que quedarme solo con los buenos momentos y disfrutar de cada minuto a su lado, cuidándola como lo he hecho siempre y sobre todo, con mucha paciencia…

Por ese motivo me he animado a escribir este blog, para contar la historia de mi perrita Lassie, para contar como va avanzando esta cruel enfermedad para quien busque información y para dar apoyo y consuelo a quien lo necesite, a quien pase por lo mismo que yo…

Gracias.